jueves, 15 de julio de 2010

Marcha naranja o rojas manchas de sangre ??




En realidad no había pensado reflexionar demasiado sobre el tema que está en el tapete de todos los medios por estos días, es decir el tratamiento de una ley de matrimonio igualitario para personas del mismo sexo, y no digo esto porque el tema no lo mereciera, todo lo contrario, es un tema muy importante para la sociedad actual y del futuro, pero para ser sincero ya estaba de acuerdo con esta ley desde hace muchos años atrás, cuando ni siquiera de hablaba de una ley, y además el partido del cual soy parte, el humanista, se expreso varias veces dando su apoyo de diversas maneras a esta ley a punto de sancionarse, o no, veremos que resuelve el Senado de la nación, uyy, otra vez el Senado ocupando la gran escena.
Pero en el fragor de las noticias una me llamo bastante la atención, ayer sectores de la Iglesia Católica, algunas iglesias evangélicas y mucha más gente convocaron a una marcha multudinaria en contra de esta ley, lo que por supuesto está muy bien, uno debe saber aceptar que hay gente que piensa distinto, aunque esos pensamientos sean salidos de la cueva de Medievo europeo.
Pero otros ínfimos detalles me hicieron estallar un poquito esa enérgica cólera que sale de lo oculto de uno mismo cuando la indignación sobrepasa todo umbral posible.
Resulta de una de las más activas convocantes a esta marcha es una señora de apellido Pando, mujer de un ex militar y defensora acérrima de todo lo actuado por la dictadura en este país, hasta públicamente defendió el robo de bebes de personas desaparecidas, eso sí, la sinceridad ante todo, la señora no se priva de decir lo que piensa de verdad¡¡¡
Cuando parecía que esto ya era mucho otro detalle me hizo subir la mostaza, llamaron a la marcha la marcha naranja, en defensa de los chicos y no sé que mas ¡¡¡¡¡¡¡¡ ahhh no, la marcha naranja, el color del humanismo universalista, el nombre de mi blog, eso sí que no ¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡
Así que ya subido al tren del pensar convulsionado me pregunto, y quizás la Iglesia o la señora Pando puedan responder:
- Cuando los defendidos por la señora Pando, es decir militares que formaban parte del Estado Nacional asesinaban y desaparecían gente, y entregaban sus pequeños hijos a otros militares o amigos civiles, donde estaban los hoy tan reclamados derechos de los niños??,
- Cuando miembros prominentes de la Iglesia sabían y apoyaban tales prácticas, donde estaba el supuesto valor de la familia??
- Y si miramos un poquitito atrás en la historia Argentina para no irnos tan lejos, sabían que la Iglesia se opuso fervientemente al matrimonio civil, heterosexual por supuesto, alrededor de 1888?, claro, es que ellos tenían el monopolio de los matrimonios y las actas de nacimiento ¡¡¡¡¡, claro que también se opuso con todo lo que pudo al divorcio sancionado durante el primer gobierno democrático, no será que mucha gente a la hoy le parece muy raro esto del matrimonio entre personas del mismo sexo pueda ver estas cuestiones en perspectiva y darse cuenta que el mundo está cambiando y hay que cambiar puntos de vista y tratar a los demás como uno desea ser tratado ?
- Y para no discriminar y dejar a muchas Iglesias evangelistas sin critica, nunca explicaron porque en el año 1999 hicieron campaña como nunca a favor de un señor llamado De la Rúa, lo explicaran quizás?’ no se sabe, quizás nunca, porque tendrían que decirle a sus seguidores, mayoría de gente humilde, como quedo el país y sus trabajos al poco tiempo.
Así que no tanta marcha naranja, porque muchos tienen las manos manchadas con sangre y compensan su sucia y obscura conciencia diciendo y haciéndose creer a ellos mismos que actúan a nombre de Dios, pero eso, eso ya es como para otro debate de opiniones, por lo pronto, que no manchen el naranja con sus sucias manos, por que el naranja mi amigo, para muchos es como un color sagrado, vio?
Pdata: pocas horas después de escribir estas líneas el Senado transformó en ley el matrimonio entre personas del mismo sexo, algo para festejar ¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡

No hay comentarios:

Publicar un comentario